Ya no hay análisis social que pueda prescindir de los individuos, ni análisis de los individuos que pueda ignorar los espacios donde ellos transitan.
Lugares que son un inmenso paréntesis, que acogen a los individuos cada día más numerosos y por los que también transitan palabras e imágenes que reencuentran su raíz en los lugares todavía diversos donde los hombres tratan de construir una parte de su vida
En la realidad concreta del mundo de hoy, los lugares y los ‘no lugares' se entrelazan, se interpenetran. El retorno al lugar es el recurso de aquél que frecuenta los ‘no lugares'. Lugares y ‘no lugares' se oponen o se atraen como las palabras y los conceptos que permiten describirlos. Pero las palabras de moda son las de los ‘no lugares': “TRÁNSITO, INTERSECCIÓN, PASAJERO, VIAJERO Y MONUMENTO”.
Son parte de un texto, a veces adornado con un dibujo esquemático dirigido al transeúnte que no está en situación de acercarse al punto notable señalado y que se encuentra condenado a obtener placer con el solo conocimiento de su proximidad.
El tiempo y la luz como negación del mismo, el ‘no lugar' (la carretera, la rotonda) y la señalización de su límite, son los conceptos que conforman este proyecto basado en una intervención que respeta el espacio ya creado, intensificándolo sutilmente mediante el énfasis en un signo abstracto, casi una señal, que alude tautológicamente al lenguaje que le es propio y al espacio en que se conforma.
El término municipal de Alaquàs es una cuña alargada de este o oeste, entre los términos de Aldaia, Xirivella, Picanya y Torrent. En esa cuña se encuentran nueve rotondas: la 9 en posición central y el resto en el perímetro del término.
Las rotondas 1 y 7 pertenecen a la red viaria comarcal: se ubican en el corredor comarcal sur, tienen un diámetro de 80 m y facilitan el acceso a las rondas de circunvalación al término municipal de Alaquàs (la 1 al norte y la 7 al sur). Ambas rotondas dan paso, por el este, al núcleo urbano y, por el oeste, a las escasas zonas cultivadas que aún se conservan en el municipio y a los polígonos industriales de Els Mollons (la 1 ) y del Mas del Jutge (la 7 )
La rotonda 8 , al oeste de la 7 , remata el vial que, como ronda sur, marca el límite con el término municipal de Torrent. Tiene un diámetro de 70 m. La rotonda da acceso, al norte, al polígono industrial de Els Mollons, al sur, al polígono industrial del Mas del Jutge y, al oeste, al cementerio de Alaquàs, sabiamente situado en el extremo occidental del término municipal, alejado del núcleo urbano que se construye a levante.
Las rotondas 6 , 5 y 4 facilitan el acceso al núcleo urbano de Alaquàs desde la ronda sur, a partir de la rotonda 7 . Sus respectivos diámetros van en aumento de oeste a este: 17m la 6 , que resuelve el cruce con el Camí Vell de Torrent; 30 m la 5 , que da acceso, al sur a Torrent y, al norte, al sistema de avenidas principales del núcleo urbano de Alaquàs (Pablo Iglesias, Ausias March y Blasco Ibáñez) que desemboca al nordeste en la rotonda número 3 ; 45 m la 4 desde la que se puede volver al cinturón comarcal sur, seguir hasta Picanya, o bien enlazar con la mencionada rotonda 3 en la encrucijada de los términos de Xirivella, Aldaia y Alaquàs.
La rotonda 3 , de 65 m de diámetro resuelve un complicado cruce que nos devuelve, al norte, al corredor comarcal mediante un puente sobre la vía del ferrocarril de vía estrecha, mientras que al oeste conecta con una zona industrial y, al este, con el acceso al sur del núcleo urbano de Aldaia y al sistema de avenidas principales de Alaquàs que finaliza en la rotonda 5 .
La rotonda 9 , de 20 m de diámetro, resuelve el cruce entre la travesera de Bovalar al norte y al sur, el camí de Bovalar al oeste que, mediante un puente sobre el corredor comarcal conecta con la parte occidental del polígono industrial del Bovalar y, al este con el núcleo urbano de Alaquàs.
Por último, la rotonda 2 , en proyecto, tendrá 40 m de diámetro; se sitúa en la ronda norte, entre la 1 y la 3 , en el límite con el término de Aldaia, al final del eje de la calle Francesc Forment que estructura una zona de ensanche del núcleo urbano de Alaquàs con un carácter muy particular; esta rotonda se convertirá en una importante vía de acceso desde el norte y resolverá la conexión con el sur de Aldaia. Esta rotonda, junto con la zona verde lineal que se extiende ante el barrio de ensanche antes aludido, configurará la fachada norte de Alaquàs, la que se ve desde el sur del núcleo urbano de Aldaia.
Excepto la no construida rotonda 2 , todas las demás están dotadas de arbolado, con especies propias de clima mediterráneo, tales como pinos, olivos, acacias, ... y/o arbustos de especies olorosas como tomillo, romero, herbe d'olives, ... No tenemos constancia de si son preexistencias o son plantaciones posteriores a la ejecución de las rotondas. En general, el arbolado es de poco porte, incluso raquítico en la rotonda 3 e inexistente en las 5 y 6 . La superficie de las rotondas es un casquete esférico con cima, más o menos pronunciada, en el centro y especies vegetales tapizantes, excepto en la rotonda 9 cuyo suelo es de tierra rojiza, sin vegetación.
El concurso plantea la adecuación de las rotondas teniendo en cuenta su relativa proximidad entre ellas y con el núcleo urbano de Alaquàs, y otorgarles una funcionalidad adicional como soporte informático y referencial para el municipio, que compatibilice el diseño propuesto con las condiciones del vial de circulación en que se insertan: en particular se exige una visibilidad adecuada y suficiente apropiada para su funcionalidad principal como elementos que facilitan y ordenan el tráfico rodado en las intersecciones.
Para cumplir estos objetivos, se propone:
A Se considera suficiente el tratamiento vegetal existente. La problemática en este aspecto, se reduce a la cuestión del mantenimiento, que debe procurar su correcto desarrollo. Si no existiera, se debe dotar a cada rotonda de sistemas de riego adecuados.
B Para aumentar la presencia de las rotondas se propone la colocación de terminales de fibra óptica en las llagas de los bordillos que las confinan.
C Para captar el interés de los usuarios de la vía de comunicación, empleamos signos abstractos, casi señales, de fácil lectura para evitar distracciones. Además pretendemos captar el interés de los ciudadanos peatones en aquellas rotondas de carácter más urbano. Empleamos para ello mangueras y tubos de fibra óptica, protegidos en su base por tubos de acero inoxidable. Con estos materiales confeccionamos signos abstractos adecuadas a cada una de las rotondas, con los siguientes criterios:
C1 El tamaño de las señales propuestas será proporcional al diámetro de las rotondas.
C2 La complejidad del diseño, dependerá del carácter más o menos urbano de la rotonda.
MATERIALES
La propuesta resuelve todas las rotondas con tres materiales: la vegetación existente, fibra óptica y tubos de acero inoxidable .
La vegetación dará idea del paso de las estaciones: primavera, verano, otoño e invierno.
La fibra óptica , mediante terminales situados en la llaga de los bordillos que las limitan, reforzará la presencia nocturna de las rotondas. Además mediante su utilización en mangueras con alma metálica rematarán los signos abstractos con los que pretendemos captar el interés de los ciudadanos, tanto los que conductores como los peatones. Estas mangueras permiten una selección de hasta ocho cambios de colores que permitirán lanzar información sobre distintos acontecimientos que sucedan en el municipio.
Los tubos de acero inoxidable protegerán las mangueras de fibra óptica en su base. Además, con sus reflejos sirven para manifestar la presencia de los signos abstractos que proponemos durante el día.
La conveniencia de la ubicación en las rotondas de estas señales, de estos signos abstractos (elementos innovadores, según las bases) se justifica suficientemente en los apartados anteriores. En cuanto a su presupuesto, estimamos que rondará las cincuenta mil pesetas por metro lineal, dependiendo, pues, el precio de cada rotonda de la magnitud de cada señal y del número de elementos que la compongan.